Como muchas personas no os estáis enterando de qué va esto, os lo voy a explicar, con mucho más detalle, ya que lo he hecho en privado estos días para justificar mi condena a este caso. Porque esto para mi es una guerra, la de muchas, por denunciar y acabar con estos abusos innumerables… y ojo porque creo que muchas más mujeres habrán tenido casos peores. También aviso, lo que expongo aquí ya está superado, no sintáis lástima por mi porque digamos que lo que está aquí escrito es de las cosas más flojas a las que nos hemos expuesto las mujeres durante toda nuestra vida, y por desgracia empezando desde niñas:
1. A los 8 años, un hombre sexagenario, cliente del antiguo bar de mis padres, aprovechando la confianza que tenía con ellos me pidió ayuda para subir las bolsas de la compra (vivía encima de nuestro bar), lo hice, y una vez en su piso y cuando me disponía a bajar me pidió que entrara con excusas, me sentó en un sofa, me sacó un vaso de agua y empezó a tocarme mis partes diciendo que había crecido mucho… duró un escaso minuto… no pasó de eso, logré salir y tarde años en contárselo a mis padres, porque no entendía qué había pasado.
2. A los 14-15 años, y esto me pasó con amigas, que puede que lo lean, paseando por los Playmon, a mediodia, un hombre muy mayor en coche se paró y nos llamó. Pensando que nos preguntaría por una calle, nos acercamos. El tipo se sacó sus partes para que lo vieramos, éramos menores, pero adolescentes en grupo, y todas le llamamos “Viejo Verde!” y nos fuimos de allí.
3. También a los 14-15 años, de vacaciones en Galicia, un hombre de unos 50, quiso comprobar si a mi edad tenía o no desarrollado el pecho y me dió una sobada muy larga que me incomodó a mi y a la adolescente que estaba a mi lado. Igualmente no reaccionamos ninguna, porque no sabes ni lo que hacer, solo sabes que te sentiste muy incómoda.
4. A los 23 o así, viajaba en un bus por Madrid, sentada en la parte de atrás, un hombre de unos 30-40 me tocó el hombro, me giré y se sacó sus partes para que se las viera, me fui rápidisimo a la parte delantera del bus, aquí ya si que me quejé un poquito más en alto, pero el hombre disimuló y no pasó de ahí.
5. A los 33 o así, un chico de unos 20 años o poco màs, viniendo de fiesta sola a las 5am, en Madrid, me siguió de noche hasta mi portal, lo sospeché desde el principio, los últimos metros eché a correr con las llaves en la mano, logrando entrar al portal y cerrando antes de que se avalanzara sobre mi. Se quedó mirándome desafiante en la puerta. Fingí que llamaba por tlf a alguien, cuando subí a casa no encendí la luz y me asomé a gachas por la ventana para ver si se había ido. Me emparanoié un mes por si se había percatado de que vivía sola y podría seguirme o vigilarme.
Y esto SEÑORES, es sólo la mitad de lo que me ha pasado a mi. A mis amigas y mujeres de todos los ámbitos también les ha pasado casos similares. Tranquilos, no tengo trauma ni siquiera por el primer caso, para mi el más grave, que recuerdo perfectamente, pero que ya he gestionado con psicólogos varios a lo largo de los años.
Y mi pregunta es para los hombres: ¿cuántos hombres habéis vivido situaciones así o similares durante vuestra vida? Pues eso, nos pasa a nosotras infinitamente más que a vosotros, simplemente por ser MUJERES.
Por eso, SE ACABÓ. Es el grito de varias generaciones. Como la mía. BASTA DE ABUSOS!